23Aug
Cuenta la historia que en la década del 50 Lapa era el corazón de la vida melancólica y bohemia de Rio de Janeiro. Allí se daban cita escritores, músicos, poetas, artistas y un sinfín de personajes que marcaron la historia cultural del país y que fomentaron que el barrio atravesado por un acueducto romano estratégicamente ubicado se transformara en uno de los íconos más emblemáticos de la ciudad. Dos décadas después de su fundación, en los gloriosos años 70, el espacio se volvió sitio ineludible para el movimiento Tropicalia y en sus calles resonaban las melodías de los hoy ya consagrados baluartes de esa movida musical (tales como Caetano Veloso, María Bethania, Chico Buarque, Milton Nascimento o Gal Costa entre otros) consolidándolo como una verdadera gema cultural de Río, al punto tal de que muchos historiadores lo han llegado a comparar con el parisino barrio de Montmartre.
Hoy, pese a su decadencia habitual y una estética bastante alejada a la de la bohemia parisina que alguna vez se le atribuyó, Lapa es uno de los sitios elegidos por los turistas para comenzar un recorrido por la ciudad ya que no sólo se encuentra en una de las márgenes de la urbanización carioca sino porque atesora algunos espacios que valen la pena visitar y que los arropa en su seno otorgándoles identidad y prevalencia turística (tal es el caso de la famosa Escalera Selarón o la cercanía al bucólico Barrio de Santa Teresa)
UN BARRIO REPLETO DE ARTE
Lo primero que asombra apenas se llega a la plaza en la que se encuentran los arcos del acueducto es una enorme cantidad de muestras artísticas de los más variados estilos. Arquitectura, pintura, esculturas, graffittis y composiciones urbanas materializadas por objestos y personas que motivan la retina del viajero se apropian del lugar y le dan una identidad pocas veces vista en otros lugares del globo. Por ello "Arte" es la palabra que mejor podría definir al barrio. En todas sus formas y en toda su expresión:
En la plaza de los arcos se encuentra una serie escultórica de leopardos intervenidos por diferentes artistas. Tal como sucede con los osos de Berlín o las Meninas que invadieron Madrid, el leopardo fue el animal elegido para representar la cultura carioca y hacen del espacio un punto obligado por turistas para tomarse algunas imágenes.
El eclecticismo de Lapa alberga avenidas, edificios de estilo Art Nouveau, negocios, bares, las clásicas palmeras que atraviesan la ciudad y una concentración de personas que lo atraviesan con fines turísticos, laborales o de paso, ya que se encuentra a un paso nomás de la mayoría de los sitios y espacios céntricos.
La geografía del barrio cambia a sobremanera cuando se atraviesa la Plaza y se cruza la Rua Evaristo Da Veiga. Allí aparece una serie de edificios coloniales y otros construídos a principios del siglo XX que contrastan con la estética tradicional el lugar. Piezas de estilo Art Nouveu, neoclásicas y cargadas de elementos de mestizaje americano, muchas de ellas permiten reconstruir el pasado de gloria y esplendor que en sus orpigenes tuvo la población.
Fachada de estilo Art Nouveau restaurada y cara visible del Hotel- Restaurante - Bar Casa de Luzia
El sincretismo artístico de algunas construcciones dejan ver la influencia de Portugal en la edificación cultural del país. Azulejos de estilo lisboeta adornan la fachada de algunas casas de familia.
Los murales y los graffitis callejeros son un emblema de Lapa. En ellos se pueden observar muchas de las filias y fobias de los moradores y hablan de una enorma capacidad de artistas para materializar la enorma cantidad de piezas que abundan en cada una de sus calles.
Reivindicaciones LGBT y el recuerdo a la activista Marielle Franco asesinada hace unos años como consecuencia de la intolerancia racial y sexual que profesa una parte de la población.
La presencia de la población afro en la ciudad le otorga al barrio un sello distintivo. Reivindicaciones a la negritud y muchas de las creencias provenientes del otro lado del Atlántico quedan reflejadas en muchas de las piezas grafitadas en diferentes murales, paredes o monumentos públicos
Advocaciones cristianas y otras de corte bíblico se hacen presentes en el barrio
Las creencias de la Negritud y del Cristianismo conviven en cada uno de los rincones de Lapa
La religión como uno de los accesos al mundo del conocimiento
En los graffittis callejeros hay referencias a Madame Sata, un interesante personaje que en los años 30 se hizo famoso por realizar espectáculos de music hall vestido de mujer y que se hizo famoso por rescatar de la miseria y las manos del crimen a niños pobres del Río de Janeiro de aquella época. Luego de su muerte se transformó en un verdadero mito y la historia local lo glorificó como parte ineludible de la memoria del barrio.
Madame Satá es recordado como uno de los personajes más emblemáticos e influyentes del barrio de Lapa, tanto que hasta tuvo una pelicula y varias investigaciones en el ámbito académico y cultural de Brasil.
El barrio adquiere un aire pintoresco al estar enmarcado en medio de graffittis, bares y espacios que evocan el pasado cultural de la zona
La diversidad de bares, cafeterías y restaurantes lo hacen un lugar propicio a la hora de probar algunas de las delicias de la gastronomía local.
La samba dice presente en cada uno de los rincones del barrio
Expresiones de diversidad en todos los sentidos identifican a Lapa como una de las zonas más amigables y propicias para pasar un buen momento cuando se plantea una visita a la capital brasileña.
Mujeres emblemáticas de la samba presentes en los murales callejeros
Varios artistas locales utilizaron muchas de las viviendas o construcciones del barrio para llevar a cabo sus expresiones callejeras
El barrio abunda en una serie de edificios y trazos urbanos que lo vuelven único e irrepetible. El contraste visual de imágenes que se experimentan estando allí inspiran a quedarse un buen rato observando las escenas que allí suceden o bien haciendo forografías imborrables para testimoniar su paso por Río.
El enjambre de cables telefónicos y de luz son uno de los elementos que mas llaman la atención y que le dan al barrio un aspecto particular que lo diferencia del resto de ciudades latinoamericanas
Esta ultima imagen del fotorreportaje simboliza la esencia del Barrio de Lapa y refleja el día a día allí. Mercados callejeros, tiendas de ropa usada, pensiones y hostales de dudosa categoría, olor a comida en cada rincón y una población que esconde historias que bien podrían ser llevadas al cine u ocupar decenas de textos en guías turísticas de Brasil.
LAPA en Google maps
Comentarios